Tarta mouse de capuchino

Y seguimos con el capuchino... cojo carrerilla y no hay quien pueda parar...jejeje...

Ayer me llamó mi hermana... para preguntarme sobre algún postre que ella pudiera hacer...
(dejenme pensar... descartando fontanería, albañilería, electricidad, jardinería, carpintería... ah!!! pues... mi hermana hace unos asados impresionantes... pero...postres ??? va a ser que no...)

Había invitado a comer a la familia de Nuria.
Nuria es amiga y compañera de cole de mi sobrina Marina.
Es una niña encantadora, bueno, todos ellos lo son.
Pero especialmente Nuria, tiene un amor por mi niña impresionante... y mi niña por ella.

Así que pensando en lo que tenía en casa, que ayer noche no era gran cosa, me puse manos a la obra.


Ingredientes:

Para la base:
* brownie de chocolate
(pueden utilizarse galletas o bizcochos)
* almendras molidas
* mantequilla

Para la mouse:
* 250 ml de leche
* 1 sobre de chantilly
* 3 claras de huevo
* 3 hojas de gelatina
* 3 cucharadas de capuchino
* unas gotas de limón
* una pizca de sal

Para el adorno:
* chocolate en tableta
* crema de la mouse
* nesquik

Preparación:

Sumergimos las hojas de gelatina en agua.
Metemos en el congelador 200 ml de leche

Desmigamos el brownie, mezclamos con unas cucharadas de almendras molidas y le ponemos un poco de mantequilla reblandecida, amasamos un poco y lo colocamos de base en una bandeja con aro, extendiendolo bien.
Reposamos en la nevera.

Los 50 ml de leche restantes los calentamos un poquito y diluimos en ellos las hojas de gelatina que teníamos puestas a remojar, bien escurridas.
A los 200 ml de leche que teníamos en el congelador les añadimos las tres cucharadas de capuchino, batimos un poco, añadimos la leche con la gelatina y por último un sobre de chantilly.
Batimos hasta que marque ondas y picos.

Montamos a punto de nieve las tres claras (con unas gotas de limón y una arenita de sal).
Suficiente con que no se caigan, no es necesario que estén duras.

Con mucho cuidado incorporamos las claras al chantilly, removiendo de abajo arriba con una espátula.
Vertemos en el molde y reservamos un poquito.
Con la ayuda de un peine de repostería hacemos unas ondas.
A la crema que hemos reservado le añadimos una buena cucharada de nesquik o cacao para darle más sabor y otro color.
La metemos en una manga pastelera con boquilla rizada.

Dejamos reposar en la nevera unas horas. Yo la dejé la noche, casi ocho horas.
Para los adornos, rallamos virutas de chocolate y las vamos pegando por los lados, lo que sobra se cae en la bandeja y se retira después.
Hacemos unos rizos o moños con la manga y terminamos con unas bolitas de caramelo.


Facil, sencillo, que cuesta más trabajo explicarlo que hacerlo.
Espero que les guste.
Al menos ha sido hecho con todo mi cariño.